Me escabullí en la selva

Noche femdom en la selva, para experimentar una mística y terrorífica práctica BDSM con mi sumisa. A ver qué pasa...

Siempre he sido una criatura nocturna y sensual. Me encanta la noche, la oscuridad, las estrellas, la luna, los lobos y todo lo que ocurre en ese lapso de tiempo.

A menudo me aventuro en el bosque, sin rumbo ni idea de qué hacer, por la simple razón de sentir adrenalina y saborear la aventura.

Esta vez me llevé a mi sumisa conmigo. Me sigue a cuatro patas, como un perro fiel. Es mi guardaespaldas, tiene que defenderme si es necesario.

Esta noche femdom es oscura, hay pocas estrellas en el cielo, quiero adentrarme en la naturaleza y sentir emociones fuertes.

Veo una puerta de oro: ¿la abro? Es emocionante, mucha adrenalina, es como tener un fuerte orgasmo...